Circuito de arte a cielo abierto: muralismo y exposiciones en Palermo Viejo

El movimiento fue impulsado por el colectivo “Palermo Pinta”, que desde hace tres veranos organiza acciones para intervenir artísticamente el barrio durante febrero.

Este año, el foco estuvo puesto en la calle Gurruchaga, entre Honduras y Gorriti, donde se renovaron más de 10 frentes con murales nuevos, grafitis poéticos y afiches ilustrados. Las obras tomaron como eje temático la identidad barrial, la vida cotidiana y los vínculos humanos. Participaron artistas emergentes de la zona y referentes del circuito urbano como Malegría, Sapo y Flora Pintora.

El recorrido fue acompañado por una guía digital descargable desde un QR que se pegó en postes y vidrieras. Así, quienes caminaban podían escanearlo y acceder a los nombres de los artistas, textos curatoriales breves y audios explicativos. También se realizaron visitas guiadas al atardecer, con participación abierta, lo que permitió dialogar sobre cada obra, su proceso y su contexto.

Varios cafés y locales de diseño independientes se sumaron a la movida con microexhibiciones en sus vidrieras. Uno de los puntos destacados fue la intervención de la Librería El Atril, que colgó en su fachada una obra textil colectiva bordada por vecinos. La librería también fue sede de una charla sobre arte barrial y memoria visual.

A lo largo de la semana, vecinos y vecinas compartieron imágenes de los murales en redes sociales, viralizando la movida con los hashtags #PalermoPinta y #ArteBarrial. El proyecto incluyó también intervenciones de artistas que trabajaron en vivo sobre puertas, persianas y paredes medianeras. Esta fusión entre arte callejero y cotidianeidad fue uno de los aspectos más celebrados de la iniciativa, que ya proyecta nuevas ediciones para otoño y primavera.