El "hospital de estatuas" de Palermo reabrió al público: cómo visitar el taller que restaura el patrimonio porteño

Caminar por Palermo puede ser un plan perfecto... hasta que el calor aprieta. Entonces aparecen esos refugios benditos: espacios con aire fresco, buena música, libros por hojear y algo rico para tomar. Las librerías con cafetería se multiplicaron en el barrio en los últimos años, y ya son parte del circuito porteño de los que buscan una pausa tranquila entre tanto movimiento.

Acá van cinco espacios donde podés entrar, pedir un café, abrir un libro y quedarte el tiempo que quieras.

📚 Libros del Pasaje (Thames 1762)
Un clásico de Palermo Soho. Tiene un fondo con patio interno, mesas con sombra y una carta que incluye limonadas caseras, tostados y budines artesanales. El café está bien tirado y hay libros en promoción todo el año. Ideal para perderse un rato entre estanterías y quedarse leyendo sin apuro.

📚 Eterna Cadencia (Honduras 5582)
Una librería editorial que también es un oasis. Tiene un patio con plantas, mesas pequeñas y un salón climatizado. Ofrecen café de especialidad, jugos naturales y medialunas de manteca recién horneadas. Hay enchufes para cargar el celular y wifi, por si hace falta.

📚 La Cúpula (Av. Santa Fe 4201, dentro del shopping Alto Palermo)
Aunque está en un shopping, este espacio sorprende. Una librería boutique con mesitas de madera, buena selección de novelas gráficas y cafés fríos con sabores. Está en el segundo piso, alejada del bullicio, y suele tener descuentos por compras combinadas de libro + bebida.

📚 Club Cultural Matienzo (Pringles 1249)
Un centro cultural con librería de autor y cafetería de especialidad. No está en pleno Palermo Soho, pero sí dentro de los límites de Palermo Viejo. Ofrece charlas, presentaciones y espacio de coworking. El café es excelente y los libros que venden son curaduría pura.

📚 Cúspide Libros – EcoLector (Paraguay y Gurruchaga)
Esta sede tiene un espacio tipo café bar donde se pueden ojear libros antes de comprar. Los fines de semana suele haber presentaciones y descuentos especiales. Ideal para una parada técnica con aire acondicionado después de caminar por la feria.

Cada una tiene su estilo, pero todas comparten algo: invitan a quedarse. En un verano porteño que no da tregua, encontrar estos espacios puede ser la diferencia entre una tarde sofocante y una experiencia de lectura, descanso y café inolvidable.

Ubicado en el corazón del Parque Tres de Febrero, el espacio donde se restauran las más de 2.400 esculturas de la ciudad ahora podrá ser visitado por vecinos y turistas, sumando un nuevo atractivo cultural al barrio.

En el centro neurálgico del Parque Tres de Febrero, en la Plaza Sicilia, se encuentra uno de los talleres más importantes y singulares de la ciudad. Es el Monumentos y Obras de Arte (MOA), conocido popularmente como el “hospital de estatuas”. Este espacio, fundado en 1956, es el encargado de mantener, limpiar y restaurar el invaluable patrimonio escultórico porteño, compuesto por más de 2.400 piezas. Tras una obra de ampliación y modernización que demandó ocho meses, el taller reabrió sus puertas con una doble novedad: mejores condiciones para sus trabajadores y la apertura al público general, que ahora podrá conocer de cerca el minucioso trabajo de los restauradores.

La reapertura se celebró anoche en el marco del programa “Monumentos Bajo las Estrellas”, con un evento que incluyó música en vivo, intervenciones artísticas y un patio gastronómico. En el acto estuvieron presentes el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, y el ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi. Las autoridades destacaron que el objetivo de la obra era saldar una deuda con el personal del taller y, al mismo tiempo, abrir el espacio a la comunidad. “Este lugar se estaba viniendo abajo y los artistas que trabajaban acá lo hacían incómodos, con frío, a veces tenían goteras, y la gente no podía disfrutar de lo que ellos hacían”, señaló Macri sobre las condiciones previas a la intervención.

La gran noticia para los vecinos de Palermo y los visitantes es que el MOA se convierte en un nuevo punto de interés cultural con acceso al público. Los interesados pueden visitar el patio de esculturas y el nuevo pabellón de exposiciones de lunes a viernes, de 10 a 17 horas. El ingreso es libre y gratuito, aunque requiere una inscripción previa enviando un correo electrónico a visitas.moa@buenosaires.gob.ar. Durante el recorrido, los visitantes podrán observar de cerca las piezas que se encuentran en proceso de restauración y comprender la complejidad del trabajo que hay detrás de cada monumento que se ve en las plazas de la ciudad.

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La obra de renovación fue integral. Se mejoraron los talleres internos para optimizar las condiciones de trabajo de los restauradores y se reacondicionaron los exteriores. Se construyó una gran pérgola metálica que crea un nuevo espacio de sombra, diseñado para exponer esculturas al aire libre y para que los visitantes puedan aprovechar mejor el entorno. “El MOA es el taller donde todo el arte público se protege y se mantiene vivo. Esta obra significa cuidar mejor ese patrimonio y que los vecinos puedan conocer el enorme trabajo que hay detrás de cada restauración”, indicó Baistrocchi.

Otra de las mejoras fundamentales de la obra fue la incorporación de un espacio propio para el archivo patrimonial del MOA. Este archivo, que reúne biografías de autores, planos, fotografías y fichas técnicas de cada escultura de la ciudad, funcionaba hasta ahora en un edificio externo. La centralización de sus más de 300 cajas y 2.500 carpetas en el mismo taller permitirá a los restauradores acceder de forma inmediata a la información histórica de cada pieza, una herramienta esencial para realizar intervenciones precisas y respetuosas con la obra original.

Con esta reapertura, Palermo suma un nuevo espacio cultural de gran valor, que permite a los ciudadanos conectarse con la historia del arte porteño y valorar el trabajo de los artesanos que cuidan la identidad de la ciudad.